Ferrosur Roca redobla la apuesta




La empresa Ferrosur Roca, adjudicataria del transporte ferroviario de cargas desde Buenos Aires hacia el centro y sur del país, instrumentó un plan de inversiones que supera los US$ 17 millones y comprende la incorporación de cuatro nuevas locomotoras General Electric, la mejora del trazado ferroviario y el acondicionamiento de vagones.

Las locomotoras tienen un costo total de US$ 8 millones y desarrollan una velocidad máxima de 102 km/h. Dos de ellas serán afectadas al transporte de cemento que comenzará a realizar Ferrosur en abril próximo entre la planta de Loma Negra, en Olavarría, y Vicente Casares, mientras que las restantes efectuarán el traslado de polietileno entre la fábrica que Dow Chemical posee en Bahía Blanca y Buenos Aires, a partir de septiembre próximo.

Seis millones se destinó a la transformación de los vagones denominados cubiertos dobles, que se usan para el transporte de carga general en unidades para el traslado de cemento a granel. La primera serie de 100 unidades (sobre un total de 300 vagones por acondicionar) estará lista en breve y permitirá agilizar notablemente los procesos de descarga de cemento a granel. A estas mejoras se agrega la reparación integral de la vía troncal, por donde circula el 80% de las cargas trasladadas por Ferrosur. "Estamos jerarquizando el transporte ferroviario de carga", dijo a La Nacion el gerente general de Ferrosur, Sergio Do Rego.

Añadió, no obstante, que las inversiones se realizan a pesar de la importante baja que atraviesa actualmente el transporte ferroviario de piedra, que representa el grueso del volumen de Ferrosur. El descenso de este traslado, a partir de la finalización y paralización de obras públicas, determinó que la compañía pase de transportar 400.000 toneladas a 255.000 toneladas en el mes.

Pero Ferrosur tiene cifradas buenas espectativas en el transporte de cemento entre Olavarría y Vicente Casares que, según se estima, llegará a las 120.000 toneladas mensuales.

El traslado de polietileno entre Bahía Blanca y Buenos Aires, a partir de septiembre próximo, también le aportará, en una primera etapa, el transporte de 270.000 toneladas anuales de la carga en contenedores, que se prevé incrementar a 370.000 toneladas en dos años.

Para este tráfico, Ferrosur está realizando un desvío ferroviario en Bahía Blanca que estará finalizando en agosto próximo. Desde esta ciudad bonaerense, el polietileno será transportado por el tren hacia la terminal ferroportuaria Ribera Sud, ubicada en Dock Sud, donde se transferirá a camiones que lo trasladen a establecimientos de clientes ubicados en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.

Asimismo, la compañía espera captar el traslado de metanol entre Neuquén y Bahía Blanca que se generará en 2002 por la inauguración de una nueva planta por parte de Repsol-YPF. Ahora, ocupa para esta empresa dos trenes de nafta semanales entre Plaza Huincul y La Plata.

También transporta PVC y soda cáustica producidos por Indupa, y frutas y pescados de exportación en contenedores térmicos.
El gerente general de Ferrosur, Serigo Do Rego, dijo que aún existen puntos por resolver para lograr que la actividad de los ferrocarriles de carga se asiente definitivamente. Entre ellos, mencionó la renegociación de los contratos de concesión, el pago de las deudas que mantienen con las empresas del sector los trenes de pasajeros provinciales y la finalización de los expedientes iniciados por los concesionarios para obtener rebajas en el canon a cambios de descensos en las tarifas. En el sector de los trenes de carga también existe preocupación por el destino de las playas de transferencia que poseen las empresas, ya que su desafectación es considerada por una serie de iniciativas gubernamentales.

Sin embargo, los empresarios ferroviarios aseguran que estos predios cumplen un papel de vital importancia en las actividades de sus empresas y a la vez evitan el acceso de camiones de gran porte a la ciudad. "Nosotros confiamos en que las autoridades consideren que el ferrocarril puede transportar grandes volúmenes a grandes distancias con mínimos riesgos para el medio ambiente", finalizó Do Rego.


fuente: diario el cronista