Hace ya muchas décadas que los testimonios de los expertos coinciden en valorar al ferrocarril como al más eficaz y económico medio de transporte, tanto de pasajeros como de cargas, y esas opiniones se ven, desde luego, correspondidas con lo que ocurre en los países de más alto desarrollo, en donde puede constatarse la plena vigencia de los servicios ferroviarios. Está claro, entonces, que la tendencia internacional marca, por múltiples motivos, el regreso al tren como medio de transporte ideal y que la Argentina no debería ser la excepción.
En ese contexto, cobran entidad los reiterados reclamos de muchas poblaciones vecinas que –desde hace más de dos décadas- vienen bregando por la vuelta del tren entre La Plata y Brandsen. Tal como se informó en este diario, se trata ahora del pedido que formulan habitantes Ringuelet, José Hernández, Melchor Romero, Abasto, Parque Industrial, Gómez y Brandsen, que han organizado una programación de actividades destinadas a promover un requerimiento que ha sido declarado de interés municipal por los concejos deliberantes de las ciudades cabeceras del tramo.
La hoja de ruta de los vecinos, nucleados en la Junta Vecinal por la Reactivación del Ramal Ferroviario La Plata-Brandsen, contempla pedidos de audiencia con las máximas autoridades de cada municipio y un fuerte trabajo de difusión entre los legisladores y vecinos.
El ramal cerrado en 1979 –sólo abierto dos veces después, por motivos excepcionales- es la llave que conecta directamente nuestra región con el interior bonaerense. Por caso, el recordado convoy “El Platense” del Ferrocarril General Roca salía desde la estación de 1 y diagonal 80 para llegar a Mar del Plata vía Ringuelet-Brandsen.
Desde el punto de vista de la producción, la recuperación del tramo ferroviario La Plata-Brandsen implicaría, asimismo, multiplicar la conexión de todo el cinturón hortícola y de una importante área rural con el Mercado Regional, el Puerto y, en definitiva, acercar con mayor fluidez los productos regionales a las grandes concentraciones urbanas del país.
Como se ha dicho, acaso una de las dificultades resida en que la mayoría de las estaciones por las que pasaba el convoy fue usurpada -o reciclada para otros usos- mientras que muchos de los durmientes que sostenían los rieles fueron robados, entre otros inconcebibles despojos cometidos en perjuicio de los ferrocarriles.
Sin embargo, ahora los vecinos aseguran que la rehabilitación del ramal no demandaría inversiones cuantiosas, además que aparejaría enormes beneficios sociales y económicos.
Pero reactivar tanto este ramal como el de Tolosa-Bavio-Pipinas, significaría darle un fuerte impulso a casi una veintena de localidades y parajes -así como a las muy ricas áreas agrícolas y ganaderas de la región- que hoy se encuentran injustamente aislados, asistidos por redes viales insuficientes y muy deterioradas. Es de esperar, por consiguiente, que no se escatimen esfuerzos, tanto gubernamentales como privados, para devolverle a la región la trascendencia de un servicio que tuvo y que no debió perder.
En ese contexto, cobran entidad los reiterados reclamos de muchas poblaciones vecinas que –desde hace más de dos décadas- vienen bregando por la vuelta del tren entre La Plata y Brandsen. Tal como se informó en este diario, se trata ahora del pedido que formulan habitantes Ringuelet, José Hernández, Melchor Romero, Abasto, Parque Industrial, Gómez y Brandsen, que han organizado una programación de actividades destinadas a promover un requerimiento que ha sido declarado de interés municipal por los concejos deliberantes de las ciudades cabeceras del tramo.
La hoja de ruta de los vecinos, nucleados en la Junta Vecinal por la Reactivación del Ramal Ferroviario La Plata-Brandsen, contempla pedidos de audiencia con las máximas autoridades de cada municipio y un fuerte trabajo de difusión entre los legisladores y vecinos.
El ramal cerrado en 1979 –sólo abierto dos veces después, por motivos excepcionales- es la llave que conecta directamente nuestra región con el interior bonaerense. Por caso, el recordado convoy “El Platense” del Ferrocarril General Roca salía desde la estación de 1 y diagonal 80 para llegar a Mar del Plata vía Ringuelet-Brandsen.
Desde el punto de vista de la producción, la recuperación del tramo ferroviario La Plata-Brandsen implicaría, asimismo, multiplicar la conexión de todo el cinturón hortícola y de una importante área rural con el Mercado Regional, el Puerto y, en definitiva, acercar con mayor fluidez los productos regionales a las grandes concentraciones urbanas del país.
Como se ha dicho, acaso una de las dificultades resida en que la mayoría de las estaciones por las que pasaba el convoy fue usurpada -o reciclada para otros usos- mientras que muchos de los durmientes que sostenían los rieles fueron robados, entre otros inconcebibles despojos cometidos en perjuicio de los ferrocarriles.
Sin embargo, ahora los vecinos aseguran que la rehabilitación del ramal no demandaría inversiones cuantiosas, además que aparejaría enormes beneficios sociales y económicos.
Pero reactivar tanto este ramal como el de Tolosa-Bavio-Pipinas, significaría darle un fuerte impulso a casi una veintena de localidades y parajes -así como a las muy ricas áreas agrícolas y ganaderas de la región- que hoy se encuentran injustamente aislados, asistidos por redes viales insuficientes y muy deterioradas. Es de esperar, por consiguiente, que no se escatimen esfuerzos, tanto gubernamentales como privados, para devolverle a la región la trascendencia de un servicio que tuvo y que no debió perder.
22/04/2013